Pasión por los ofidios

Ofidio: Se aplica al reptil que tiene un cuerpo largo y estrecho recubierto de escamas y que carece de extremidades.

El equipo de Abuso Animal entrevistó al gran conocedor de reptiles, Enrique Solórzano, en una visita realizada al Parque del Este de Caracas este 13 de enero. El siguiente video informativo gira, especialmente, en torno a las serpientes, pero hace mención a otros reptiles que habitan en el país.



Es importante recalcar que la boa, mal llamada tragavenados, que cuelga del cuello del entrevistado, tiene un bozal sólo cuando tiene contacto con el público, por políticas de prevención y de seguridad del parque. El espécimen es una serpiente constrictora que, en caso de querer atacar, mata ejerciendo presión a su víctima con los anillos que constituyen su cuerpo. Sin embargo, la serpiente, en este caso, no ejerce fuerza sobre Enrique ya que sabe que él no representa una amenaza para ella.

El terrario posee una sección de exhibición y otra, interna, de laboratorios. En éstos mantienen a varias especies de serpientes, y otros reptiles para así estudiarlos, curarlos, cuidarlos y estudiarlos. Es preciso enfatizar que, según la entrevista con Enrique Solórzano, esta institución no experimenta con animales ni los mata. Muchas veces los reintegran a su hábitat natural o bien a las fosas que existen dentro del mismo parque, en las que conviven cientos de animales; entre ellos tortugas, serpientes y caimanes.

Los datos más llamativos de la entrevista, están, sin duda, ligados a las amenazas de las serpientes (muchas en peligro). Además de mencionar a las águilas, y otros depredadores naturales, Enrique apuntó el papel del ser humano como el mayor peligro; aseverando que en varias zonas del país, se caza culebras para comercializar su carne o su piel. Las anacondas, por ejemplo, son un manjar de los llanos venezolanos y la piel de reptiles es también altamente valorada en el mundo de la moda. El caimán del Orinoco y la tortuga Arrau son otras especies gravemente afectadas por la caza ilícita, el contrabando y la destrucción de su hábitat.

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